miércoles, 16 de julio de 2014

Levantan en Mérida a abogado 'del diablo'

A menos de un mes de la ejecución de un abogado en la colonia García Ginerés, se reportó la desaparición y posible 'levantón' del licenciado en derecho Alejandro Gabriel Ross González.

Quien es conocido porque defiende a narcomenudistas, ladrones de motores marinos y pescadores de pepino de mar. Desde el domingo por la mañana, uno de los colaboradores de Ross González, al no tener noticias de su jefe, promovió un amparo exploratorio por la posible detención del abogado por elementos de alguna corporación policiaca, local o federal.

También se llevaron escritos para averiguar a disposición de algún juez, pero la respuesta fue negativa. Entre los casos importantes que vio Alejandro Ross recientemente, destaca el de un cubano y otros hombres, aprehendidos por robo de motores fuera de borda, además de que defendió a pepineros.

Igualmente, participó en la liberación de la banda de los 'poncha llantas colombianos' implicados en el atraco al tesorero de Samahil.

Se mencionó que fue 'visitado' en su domicilio por agentes estatales y luego por tres civiles, que se lo llevaron con rumbo desconocido. Era común verlo fungiendo como abogado de narcomenudistas.

Además, otras fuentes indicaron que posiblemente estaba escondiéndose de las autoridades y mantenía cierta comunicación con sus amigos, pues habían amenazado con hacerle daño.

Esta información no pudo ser confirmada ni negado, pero seguía desaparecido hasta ayer por la tarde.

Caso similar
Otro abogado que ha corrido con la misma suerte es Mohamed Kantún Barceló, quien defendía al multidefraudador Francisco Renán Ávila Caraveo, que por medio de la empresa Mex Forest desfalcó a sus accionistas, que invirtieron fuertes sumas en dólares en esa casa de cambio.

Kantún Barceló acostumbraba a ver casos complicados, y se sabe que fue golpeado como medida de advertencia para que ya no fuera el abogado defensor de Ávila Caraveo, ya que había muchos intereses de por medio y de continuar con la investigación se afectaría a reconocidas y respetables personas.

Tramitó un amparo exploratorio en contra de todas las autoridades, ante una posible detención y luego se disculpó con sus clientes porque ya no podía continuar viendo los casos.

Luego salió de la ciudad, pues fue golpeado y escarmentado.

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